La revolución fintech permite que todas las compañías, operen o no dentro del sistema financiero, puedan integrar funcionalidades que hasta hace un tiempo estaban limitadas únicamente al sector bancario.
Qué es el Banking as a Service
Muchas empresas de tecnología financiera han elegido crecer en el segmento de banca como servicio (BaaS por sus siglas en inglés), que no es más que proveer a empresas tecnología bancaria en forma tercerizada. Mediante APIS, las compañías pueden “enchufar” y “desenchufar” funcionalidades a medida que las requiera su negocio, a un costo menor que el que implicaría desarrollarlas desde cero.
Entre las cuatro tendencias tecnológicas más importantes para el sector financiero para este año, según un estudio realizado por la consultora Deloitte a principios de 2022, que observaba que el sector debe afianzar sistemas bancarios interconectados y abiertos, aparece BaaS. Se trata de un modelo B2B entre compañías, que al fin del día persiguen un objetivo común: mejorar la experiencia de sus clientes en cuanto al manejo de sus finanzas.
Hacia dónde se encamina el mercado
Las empresas hoy en día están modelando la banca del futuro y BaaS puede ser uno de sus pilares. En muchos países, la regulación avanza hacia la banca abierta y las firmas que proveen y desarrollan el BaaS pueden tener un elemento diferenciador por anticipado.
Según las previsiones de Juniper Research, en el año 2026 el valor total del mercado de las finanzas integradas superará los US$ 138.000 millones, frente a los US$ 43.000 millones, lo que implica un ritmo de crecimiento del 26% en todo el mundo durante los próximos cinco años.
Pueden interesarse por contratar servicios de BaaS empresas con grandes volúmenes de transacciones financieras, que buscan la eficiencia de costos y de procesos; también compañías que ya tienen grandes comunidades a las que quieren ofrecerles servicios o productos financieros.
Este tipo de productos sirve para optimizar la operatoria y automatizar procesos de tecnología mientras mejora la experiencia de usuario de sus clientes. Sirve también para compañías que encuentren errores en sus procesos de backoffice o que se enfrenten a algún tipo de déficit en su administración de tiempos y recursos.
Muchos definen a este modelo como “banca on demand”, ya que las empresas pueden elegir comprar e incluir en sus sistemas las soluciones que más se ajusten a su negocio y sus necesidades particulares de cada momento.
La transformación digital de las empresas es un fenómeno imparable y el BaaS permite que todas las empresas, sin importar su tamaño, puedan participar de él. Se trata de un proceso “punta a punta”, que le ofrece a las empresas clientes una solución cerrada, pero perfectamente ajustable a su estructura previa.