El cambio de las condiciones financieras globales inaugura un nuevo ciclo para las fintech de todo el mundo.
La industria fintech, una de las más prometedoras del país y de la región, comienza a ajustarse ante la merma de los flujos inversores que posibilitaron su despegue en los últimos cuatro años.
El contexto 2022
Según el informe de KPMG Deal Advisory, en el primer trimestre de este año se registró en el país una considerable caída de las inversiones de capital de riesgo. Como el modelo de negocios de la mayoría de las empresas de tecnología financiera se basa en ofrecer productos y servicios “gratuitos”, el aporte del capital inversor es fundamental para este tipo de empresas.
“En el primer trimestre 2022 se registraron un total de 11 operaciones por U$S 60 millones en rondas de etapa temprana (semillas mayores a U$S 1 millón y series A). Sin embargo, no se observaron rondas en etapas posteriores. Por ello, el monto total de inversiones finalizó en un número inferior a los U$S 110 millones en el primer trimestre de 2021 a pesar de que la cantidad de operaciones superó las cifras de dicho período”, explicaron en la consultora.
¿Cuál es la oportunidad?
Aunque puede parecer un momento difícil para las empresas del sector, más que nada se trata de una oportunidad de redefinición. Veremos seguramente a muchas empresas fusionarse con otras. Veremos compañías replantearse su modelo de negocios y sin duda, aquellas que puedan mostrar que su actividad es rentable, serán las que mejor sobrevivan. Los inversores ya no buscan sólo empresas que cuenten buenas historias, sino que además sepan cómo generar ingresos y ser autosustentables.
Según estimaciones de Endeavor, el capital seguirá fluyendo este año para las startups de la región, pero de manera más cautelosa. Se esperan menos rondas de inversión y con tickets menores, que promediaron los US$ 50 millones, en oposición a las mega rondas que se vieron en los últimos dos años.
Sin embargo, días atrás, el banco de inversión Goldman Sachs desembolsó cerca de U$S 230 millones en Mercado Libre. La empresa de ecommerce usará esos fondos para hacer crecer su negocio de crédito en los países donde su operación tiene más peso: México y Brasil. La noticia sirve como botón de muestra para ver que, aún en medio del cambio de época que genera la suba de las tasas de la Reserva Federal y en un contexto de alta inflación global, los inversores están dispuestos a apalancarse en buenas, y rentables, historias.
Las empresas tienen ahora la oportunidad de sanear sus costos, y entender profundamente los costos de sus modelos tecnológicos. El sector fintech mostrará su resiliencia. Talento sobra y oportunidades de crecimiento también.