Del 22 al 24 de marzo del corriente año se llevó a cabo -bajo modalidad virtual- la Conferencia AML COMPLIANCE 2021 organizada por la Florida International Bankers Association (“FIBA”), evento durante el cual se abordaron temas de gran relevancia en materia de compliance para las entidades financieras y los sectores vinculados..
A continuación, mencionaremos a modo de síntesis los principales lineamientos extraídos de las diversas exposiciones, que entendemos aportan un panorama sumamente interesante en lo que refiere a la actualidad y los desafíos de la industria a nivel internacional.
Los cambios generados por la pandemia
La pandemia provocada por el coronavirus (Covid-19), ha impactado en la dinámica de todas las organizaciones, y por supuesto las áreas de Compliance no han quedado exentas de ello. El principal desafío para los Compliance Officers o responsables de cumplimiento, ha sido (y continúa siendo al día de hoy) mantener la visibilidad del área aún con la metodología de trabajo remoto.
El nuevo escenario requiere establecer mecanismos de capacitación remota del personal, manteniendo los canales de comunicación abiertos y estableciendo responsabilidades concretas según corresponda. La comunicación proactiva a nivel interno, bajo el esquema de las tres líneas de defensa, debe priorizarse.
En lo atinente al comportamiento de los usuarios de servicios bancarios, también se han evidenciado cambios sustanciales. El consumidor empezó a priorizar el home banking, como una manera más fácil y rápida de realizar transacciones, generando consecuentemente la necesidad (por parte de los Bancos) de brindar las herramientas y capacitaciones necesarias para mejorar su experiencia.
Así las fintechs tomaron cada vez mayor protagonismo, trabajando junto a las entidades financieras para cumplir con los objetivos de innovación deseados, logrando ampliar el acceso al sistema financiero de varios sectores hasta entonces excluidos.
La contracara de todo ello, fue la creciente amenaza de intentos de fraudes hacia las entidades financieras, sus proveedores y los consumidores financieros, a través de mecanismos como phishing, ransomware, entre muchos otros. En concreto, se pudo verificar al menos un 238% de aumento en estos intentos de ataques cibernéticos dentro de las actividades financieras en general.
La función de Compliance y las nuevas herramientas tecnológicas
La tecnología ha irrumpido en las áreas de Compliance cambiando sustancialmente las metodologías existentes. Hay un proceso de transformación en curso, y dependerá de quiénes se desempeñen en dichas áreas, que se tomen las iniciativas necesarias en cada organización, liderando esa transformación, aceptando el cambio y aprendiendo a trabajar con nuevas tecnologías para gestionar los riesgos.
Las áreas de Compliance deben valerse de las nuevas aplicaciones y herramientas tecnológicas para detectar actividades sospechosas, realizar monitoreos de perfiles y transacciones, etc. En definitiva, se trata de gestionar los mismos riesgos existentes, aunque de una manera diferente, optimizando su función.
Paralelamente, se precisa que los examinadores y reguladores también tengan el conocimiento y la instrucción necesaria acerca de las nuevas herramientas tecnológicas que se utilizan y que ayudan a facilitar la tarea de las áreas de cumplimiento, en particular en lo que refiere a la Prevención de Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo.
A la luz de estos lineamientos, resulta evidente que la función de Compliance (particularmente en lo atinente a la Prevención de Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo), se encuentra transitando un proceso de transformación impulsado por el desarrollo ciertas herramientas y soluciones tecnológicas de aplicación específica a esta materia.
Acompañando este contexto, desde Poincenot tech.studio desarrollamos una respuesta innovadora frente al riesgo y las complejidades regulatorias.
trak.e es nuestra plataforma RegTech, nativa cloud, basada en APIs con funcionalidades para que instituciones puedan conocer a sus clientes y automatizar los procesos de verificación de documentación, chequeos de listas de sanción, cálculo de perfil de riesgo y perfil transaccional permitiendo cumplir con los procesos de compliance y KYC a toda aquella institución regulada.